Requiem a "La belleza de la autodestruccion"

"La belleza de la autodestruccion" asi se llamaba un blog que conocí hace al menos seis años, justo buscaba información sobre las formas de pensamiento que se encaminaban a lo destructivo, quizá porque no sabía que podía crear y encontré el blog. La chica que escribía ahi era densa de verdad, nunca era vanal y creo que no tocaba lugares comunes, era buena literatura o lo que yo hubiera juzgado como tal. Hace un par de años busqé el blog de nuevo y entré en cuanto lo encontré. Pero no habia nada ahi, exepto un mensaje: "quien una vez escribío aqui, ya no existe" Ma sentí bastante jodido al leerlo. Pero supongo que es parte de toda senda.

Por cierto, cuando creí que había encontrado mi senda de antiheroe, entonces creía solo en mariconadas, no podía ver la autodestrucción de lleno como puedo verla ahora. Siempre digo que soy un marica y es la verdad, juro que si fuera un caballito de mar entrenado para escribir estas entradas de mierda, tambien lo confesaría con mi orgullo fingido de cinico mal formado. Ahora que sé perfectamente que la unica forma decente y honesta de autodestrucción es el suicidio, voy poniendome mas hedonista, aun noto mis fuerzas abandonarme, a veces las siento en mi interior, se cuelgan de mis orejas y desde la cuerda en que penden me gritan "eh, pendejo de la chingada. Ehh, imbecil sin esperanza, nos largamos de tu cuerpo. Vamos a buscar alguien mas valeroso a quien poseer" y yo por su puesto me inclino ante la tasa de baño para que desciendan y se larguen. Al fin y al cabo siempre creo que me las puedo arreglar solo. Pero luego no.