martes, 28 de noviembre de 2017

Mundo Death

Solo he pasado una pequeña parte de mi vida creyendo en la casualidad, el tiempo leyendo cosas productivas ha dejado su fruto, como que siento un ardor en no se donde cuando la gente dice cosas como que un cabrón está gordo porque odia a su madre en secreto, si fuera tan facil entender lo que le pasa al otro, viviriamos preguntandole al de junto "que me pasa we?" y san se acabo el pedo. El punto es que me cuesta trabajo creer en las causalidades, pero eso no quita que me impresione el azar.

Viajando en el metro es como mas se disfruta la literatura mierdosa (no confundir con la mierda de literatura (que publican los yutubers)) porque apretado entre harta gente apestosa le puedes creer al autor que a su personaje le pasén todas las desgracias que te cuenta. Resulta que mi musa me regaló un libro de Carlos Velazques, es una delicia y el libro está muy disfrutable; atrapado en el metro empece a leer un cuento sobre una chava comprometida con un pendejo ultra catolico que por alguna razón no se la quiere cojer, por si fuera poco al wey lo persigue la muerte, despierta y ve una sombra negra frente a el, los intentos por auyentarla fracasan, la morra sospecha que su prometido está perdiendo la razón, pero tambien cree que ella puede ser la siguiente en la lista de familiares que se le van muriendo al loquito que tiene por novio. Enojada por la falta de prau prau lo obliga a masturbarla solo para quedar mas profundamente insatisfecha, aunque ya orgasmeada.
 Me extraña que en un cuento de Velazques la protagonista no busque irse a la chingada, no busca a otro hombre, ni engatusa al suyo para que mate a su propia madre. Se queda junto a su compañero como el cabrón que se queda en la casa de los Usher para cuidar a su amigo esquizofrenico. En ese sentido este cuento tiene algo en el fondo que se siente mas truculento, porque el personaje de Poe se sale y ve la casa caer, pero todo indica que a la protagonista de "mundo death" lo que le va a caer es la voladora.

Llegando a mi estación me salí del vagón tratando de recordar si entre las peliculas de cine mondo que recomendaban en la ahora extinta revista Gorila figuraba el titulo "mundo death" o si era un cortometraje que mostraba lo mas culero de la humanidad, en forma de tripas derramadas y huesos que se salen por la piel al romperse en un video que creo que duraba 16 minutos. Por cierto quien escribia esas entradas en la Gorila era otro Carlos, nomas que Rodriguez. Hasta despues me acordé que en una nota editorial de la Gorila Carlos platicaba que leyendo Skag Boys de repente había empezado a sonar en su reproductor "monkey man", justo mientras el leía un pasaje que mencionaba la rola, no era la misma versión del libro , pero el no recordaba traer esa rola en el i pod.

Y me acordé de eso ultimo porque mientras pensaba en lo de la Gorila me di tinta que en mis audifonos sonaba "dicen que la muerte" de Rodrigo Gonzales, que justo habla del miedo que la gente le tiene por ser ineludible.Y  volví a sentir el miedo que sentía de niño leyendo a Poe , como que me entraron ñañarás. No es tan raro, pensaba. Yo sabía que tenia esa canción. Pero cargo tres discos del Rockdrigo ¿porque tenía que empezar a sonar esa mera?