viernes, 31 de julio de 2015

LA ESCRITURA AUTOMÁTICA VUELA HACIA EL MIERDERO

La escritura automática vuela hacia el mierdero,
la caída del tigre que grita incoherencias,
el ritmo de un auto tronchando la noche.

Corta la carne del sacrificio,
prepara una droga alucinógena,
sal de tu abismo y asusta a los dioses,
no detengas la orden del manuscrito.

El sexo te busca,
y tu buscas el aullido final,
la respuesta guardada al interior de la tierra
y la mano que hace el budrha del
chinguesumadre.

Los sustentos no están claros,
grito en el vacio,
y quedo lleno de vicio.

El servicio de cuarto trae dos tetas en una bandeja dorada
y hay un culito
y las piernas, hay cabellera plateada y pomulos redondeados
es la diosa del sexo entrando en la mente
para parir explosiones internas.

La lupa quema hormigas radioactivas
y nadie se inmuta.
Los pulpos palpitan
y en el fondo del mar, alguien mora,
esperando despertar,
las lagunas temen el regreso
del gran Leviatan.

Esta pluma es lenta cual cuchillo romo,
la espada no sirve,
los delfines croan
y esto parece mi clase de español.

Tengo aqui una burla ante la serenidad,
la tabla ronronea desde el sepulcro,
las almas bailan enzarzadas en mi interior,
llenome los pulmones de sangre ajena,
en la busqueda de un renacer satirizado.

La conciencia no está expandida,
ni  vuelta hacia si,
la conciencia flotante del rumbo interior.

Soy una locura interna,
dormida espero caer de la luna,
como un meteoro lleno de desmadre.
Soy la fiera esperando en un cajón,
la viuda negra debajo de la mesa,
que salta y te muerde
cuando pegas un chicle.

Fuera de la cabeza
a un lado una chica me mira,
vomitando mi soliloquio,
y tambien quiere enloquecer,
quizá siente el vació que tanto temo encontrar en mi,
la falta de conciencia,
el no SABER que un día morirá,
yo lo olvido todo el tiempo
los dioses somos olvidadizos.

Y ahora debo tallarme en madera,
elevar al cielo un altar
a la altura de mis rodillas,
el tzompantli de mis oraciones,
lugar de comunión con mi auto salvación.

Dejar de lado al animal, para ser aun mas salvaje,
la búsqueda interna del abismo
el sufrimiento como único signo de redención,
tragedia y pesimismo como bandera pirata.

Negro bandera, el color negro te recuerda la muerte
la vida recuerda la muerte,
la muerte recuerda la muerte.
muerte
            Muerte,
                         MUerte,
                                       MUErte,
                                                     MUERte
                                                                    ,MUERTe.
                         MUERTE.

Los grillos buscan un punto en que cantan a la muerte,
los gritos nocturnos son el nuevo objetivo
Sacrificio, Sacrilegio y otros Sacri´s,
como extensión de la tensión liberadora de la vida

El poder de las palabras me asusta por su fuerza,
la fuerza solo existe mientras la palabra es leída
o vomitada, recordada, procesada.
No existe fuera de la mente,.
La palabra es un puente,
es una historia que nos contamos
ahí dentro, para fingir que comprendemos al de afuera.

El relleno es lo único que nos queda
ante la limitación del cielo.
Las estrellas y las  hormigas me recuerdan mi insignificancia.
Y los muertos son prueba de la prisa que necesitamos.

El tiempo se desgañita y no podemos bajar la cortina.
Mas intentos, no hay momentos suficientes para la banalidad
del no placer. Ni para dejar a un lado la búsqueda de fuentes de
inmortalidad mnesica.

Los objetivos abstractos son la liberación
del animal en que queremos convertirnos
para eludir el sistema que impone lo tangible.
semuerdelacolalaserpiente

Los dientes apretados en torno al cuello
de una presa muerta sin reflejos de defensa
la mano que sujeta el objeto, la mente de objeto,
somos los vagabundos del Zaharma.

Por alguna razón la violencia no sirve hoy.
La mente se levanta y re-diseña en estructuras quimericas
levanta el vuelo, nada es verdad.

Soy el escribano del lodo, el grito del vacío,
un intento de visir del plañido.

Solo soy
el ropavejero de las tangas de mi destino.















domingo, 26 de julio de 2015

Mi escuela primaria fue como una carcel.

Mi primaria fue como una carcel, había hijos de puta que le quitaban dinero y comida a los demas, un compañero de clase era hijo de la conserje y se burlaba de nosotros diciendo que no tenía que levantarse temprano y que se dormía con el uniforme para no tener que cambiarse, por su puesto tampoco se bañaba ni peinaba y siempre apestaba a frituras rancias, le gustaba molestar a los demas porque tenía tres o cuatro hermanos que debían ser a menos cinco años mayores que nuestro grupo y que tomando clases en la tarde, tenían la mañana libre para partirle el hocico a quien Hijodelaconserje pidiera. A veces habia en los grupos algun retrasado mental que repetía año por segunda y hasta por cuarta vez; Conocí a un descerebrado que cursaba el segundo año cuando tenía edad para estar en sexto. Los castigos mas interesantes de las maestras, a veces eran mandar a quienes se comportaban como niños pequeños a tomar clase algunos días en los grupos de los primeros dos años, y ahi veíamos llegar a los idiotas, cargando sus mochilas pesadas de libros y libretas de los que solo se ocupaban la mitad durante un día.

Yo recibí varios castigos interesantes tambien, aunque no recuerdo porqué eran exactamente, pero me veo parado frente a la clase, junto con otros cuatro o cinco tarados, recibiendo reglazos en la espalda, con una de esas reglas de madera de medio centimetro de grosor y un metro de largo, eramos sermoneados y expuests publicamente durante media hora mas o menos y despues la clase proseguía con normalidad.

Pero ahora no importan demaciado los castigos, porque la verdadera accion aparecía durante el recreo, especialmente cuando los maestros -viejos de mierda- tenían reuniones que se extendían por encima de la medía hora. La diferencia entre un receso de secundaría y uno de primaria son tres años, en serio. En una primaria tienes metidos a niños de entre 5 y 13 años en promedio, y mas o menos año y medio de diferencia en edad es suficiente para que el niño grande joda al mas pequeño. La escuela estaba rodeada por una muralla de unos tres metros de alto y encima se alzaba metro y medio mas de mallla metalica; ahora que lo pienso, Bertha y sus ayudantes debían tener una fuerza excepcional o una resortera enorme. Pegabas la boca a una rendija cerca de la pared o el suelo y gritabas "BERTHA" y desde afuera de la escuela, de un puesto de lona venía alguíen a quiien nunca veías, pero como era el unico puesto con mercancía tan variada cerca de ahi, terminabas ubicando a todos los trabajadores. Pues se acercaban y tu pasabas unas monedas por debajo de la puerta, si tocaba tambien esperabas el cambio y despues había que correr a mirar por encima de la muralla y rezar por que ningun culero quisiera robar tu mercancía. La tienda de Bertha era una muy buena fuente de suministros, tenía frituras de varios tipos, juguetitos armables como robots de plastico con rebaba y avioncitos de unicel. Tambien a veces polvo pica pica, unas cosas que explotaban al lanzarlas fuerte al suelo y que se vendían en paquetes muy baratos de doce piezas, bombas fetidas y caca de broma.
En la coperativa de la escuela se vendía comida basura muy cara y comida cuasi sana muy asquerosa.